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De Divayth Fyr
Las habilidades de un mago con una sapiencia y poder supremos como el mío son necesarias en casi cualquier rincón de la lejana Tel Aruhn, así que, para ser nativo de Morrowind, soy un hombre viajado. Y por ello, puedo decir desde la autoridad de la experiencia personal que los funcionarios locales de baja categoría, independientemente de su raza o cultura, son universalmente desconfiados e ignorantes. «Conque un brujo», dicen. «Bien, no queremos a ningún muerto viviente en nuestra jurisdicción, ¿entendido?».
He perdido la cuenta de cuántas veces he tenido que aguantar una variante u otra de esa conversación. Estos funcionarios egocéntricos e ignorantes no pueden ni imaginar la distinción entre las diversas artes arcanas. Para ellos, todo manipulador de la magia espera la llegada de la medianoche para adentrarse en el cementerio y reanimar los cadáveres de sus vecinos y antepasados.
Imbéciles. Idiotas. BURÓCRATAS.
Ahora bien, es cierto que esa clase de magia es una herramienta común de la hechicería, y los brujos a menudo recurrimos a invocar la ayuda de Oblivion cuando un problema se resuelve mejor mediante la aplicación juiciosa de la fuerza bruta y despiadada. También es cierto que invocar espíritus daédricos para poseer y animar cadáveres, o traer las almas de los muertos para obtener información u otros servicios -en resumen, la nigromancia- es un subconjunto del arte de la conjuración, aunque inherentemente desagradable y degradante. Sin embargo, deducir de esto que todos los brujos son también nigromantes de facto es falso, equívoco y calumnioso.
Dicho esto, todos hemos sido jóvenes, y es típico de la juventud experimentar con cosas peligrosas o prohibidas. Hace ya tiempo que yo era un jovenzuelo de Tel Aruhn, y mis recuerdos de los principios de la Primera Era son imprecisos, pero es perfectamente posible que, como aprendiz, haya probado un par de hechizos de reanimación, nunca en cuerpos de gente que conociera, claro está (o al menos de nadie muy cercano), y tampoco durante demasiado tiempo. Hasta donde yo recuerdo.
En cualquier caso, sé de lo que hablo cuando afirmo que la brujería y la nigromancia son cosas MUY distintas.
Apariciones[]
- The Elder Scrolls Online (primera aparición).