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Algunos de nuestros estudiantes bosmer y khajiita tienen la impresión equivocada de que no todos los altmer de Estivalia apoyamos a nuestra gloriosa reina Ayrenn. ¡Nada más lejos de la realidad! Los altos elfos tenemos predilección por las bromas y los juegos de palabras que, en ocasiones, pueden ser malinterpretados por quienes no están acostumbrados al contacto con nuestra cultura ancestral y refinada. Para aclarar el asunto, he preparado una breve introducción a nuestra querida reina de Alinor con la intención de contar su historia de forma simple y directa para que incluso nuestros nuevos aliados del Dominio de Aldmer puedan entenderla.
Obviamente, los altmer descendemos directamente de los Divinos que crearon Nirn, especialmente la familia real de Alinor. El padre de Ayrenn, el rey Hidellith de augusta memoria, gobernó las islas de Estivalia durante largos y prósperos años, y personificó las mejores tradiciones de la Ceremoniarquía élfica, basando todas sus decisiones en los precedentes establecidos en los Pergaminos de la Praxis.
A su debido tiempo, como estaba escrito en los Pergaminos, el rey Hidellith y su esposa, la jerarca Tuinden, concibieron a una niña a la que llamaron Ayrenn, tal y como dictaba la Praxis. La princesa Ayrenn nació el 5 de Segunda semilla del año 555 de la Segunda Era, una fecha de buen augurio (aunque no mencionaré el porqué, pues carecéis del contexto para comprender todo su significado). Sin embargo, podéis creerme si os digo que toda Estivalia, Auridon y Arteum celebraron su nacimiento durante cincuenta y cinco días.
Se predijo que la princesa Ayrenn sería un reflejo de los tiempos turbulentos en los que nació, y así fue. Astuta e ingeniosa, aprendió con rapidez las lecciones de sus tutores, y desde temprana edad utilizó métodos poco ortodoxos para realizar sus tareas escolares. De hecho, a veces se sumergía tanto en sus estudios independientes que desaparecía durante días. A menudo volvía de esas excursiones con conocimientos inusuales y haciendo gala de nuevas habilidades sorprendentes.
Un día de Estrella vespertina del año 563, la familia real de Alinor al completo se reunió en la Torre de Cristal para celebrar la matriculación de Ayrenn en el Laberinto de los Sapiarcas, donde estudiaría la Praxis Regia altmeri y la Ceremoniarquía durante los 3555 días requeridos. Pero Ayrenn no llegó; en algún lugar entre el palacio y la torre la princesa desapareció y, a pesar de la búsqueda de nivel 17 que llevaron a cabo los justiciales, no apareció por ninguna parte. Sin embargo, los sapiarcas anunciaron que la noche de su desaparición estuvo repleta de señales y presagios: la constelación de la Dama parecía cabalgar la constelación del Corcel, el gran planetario giró hacia atrás y un joven aguilucho fue visto en lo alto de la estatua de Topal el Explorador.
Llegado el momento, el príncipe Naemon, el hermano de Ayrenn, fue nombrado heredero al trono de Alinor, y en 575 se matriculó en el Laberinto. Al igual que su padre, Naemon era un ceremoniarca nato que parecía disfrutar de los ritos y responsabilidades que la tradición impone al heredero. De hecho, cuando el rey Hidellith ascendió al Aetherius en el año 580, el príncipe Naemon comenzó inmediatamente a prepararse para recitar la liturgia de coronación que lo sentaría en el trono como sucesor de su padre.
Entonces, un día inesperado ocurrió lo imprevisto. Llegaron noticias desde puerto Velyn, en el continente, de que la princesa Ayrenn estaba en camino a Auridon a bordo de un barco cisne. Con asombro y premura, la Corte de Alinor partió en dirección a Primada para recibirla y llegaron justo a tiempo para presenciar su inesperado regreso. La princesa Ayrenn anunció que estaba lista como heredera mayor para asumir el trono de Alinor, y el Alto Justicial confirmó que, efectivamente, estaba en su derecho. Y así fue como Ayrenn fue coronada reina el 7 de Helada del año 580.
Ahora bien, puede que alguno de vosotros haya oído historias descabelladas sobre las aventuras que vivió la princesa Ayrenn durante el tiempo que pasó lejos de Estivalia: que navegó como primera de a bordo con un capitán pirata de Yunque, que se disfrazó de dunmer para leer los tomos índigo en las criptas de Necrom, que superó a los derviches de Rihad en su propia danza de espadas, e incluso que venció a la reina Mabjaarn Melena Escarlata de Ventalia en un concurso de beber hidromiel. Os aseguro que todos esos mitos y cuentos son absolutos disparates. Nuestra reina simplemente se estaba preparando para la Praxis y la Ceremoniarquía a su manera.
Desde que asumió el trono, ha introducido algunas innovaciones al gobierno de nuestra tierra, tal y como se presagió en el momento de su nacimiento; todos y cada uno de los sapiarcas han respaldado dichas modernizaciones. Así que, como veis, Ayrenn es la reina indiscutida de estas islas, y todo es como debería ser.
Apariciones[]
- The Elder Scrolls Online (primera aparición).