El Creador, también llamado el Todopoderoso,[1] es una deidad misteriosa venerada como la fuente de toda la creación. Fue adorado por los antepasados lejanos de los nórdicos. La adoración al Creador ahora está casi extinta, sin embargo, los skaal aislados de la isla de Solstheim aún conservan las antiguas creencias y los eruditos modernos han aprendido sobre el Creador a través de ellos.
Doctrina[]
Toda vida fluye desde el Creador como un gran río, y en el tiempo, este río fluye a su fuente. Los espíritus de criaturas muertas vuelven al Creador, él les da nuevas formas de vida y los devuelve a Mundus.
La muerte es simplemente el comienzo de la próxima etapa de este viaje interminable. Sin embargo, cada vida es un don dado en la gran sabiduría del Creador, cada una de las etapas es diferente, preciosa y sagrada. Incluso la nieve es vista como una bendición del Creador.[2]
El Creador favorece a aquellos que perfeccionan sus habilidades y desfavorece al codicioso y al perezoso. Las seis piedras de Solstheim son vistas como las representaciones de los seis aspectos de la naturaleza, los seis grandes regalos del Creador, la flora, la fauna, el sol, la tierra, el agua y el viento. Creen que las piedras son los conductos por los cuales el poder del Creador fluye en el mundo.[2]
La "unidad" con la tierra es considerada crucial para complacer al Creador. Los skaal practican este concepto y buscan la armonía con su entorno. Por ejemplo, recogen leña de árboles muertos. La caza es de subsistencia, no por deporte. La santidad de la vida exige que la violencia sea utilizada como último recurso. Los skaal extraen energía de la naturaleza, (para estar en armonía y en equilibrio con la tierra); cuando están en armonía con la tierra, ellos se suman a ella y cuando están en armonía el Creador aumenta su poder.[2]
Leyendas[]
Se cree que el Creador maldijo a antiguos guerreros con la no-vida por cometer actos de canibalismo, creando así a los draugr. Otra leyenda dice que cuando el Creador sopló en las criaturas de la tierra, su "aliento" también voló a través de los árboles. Algunos de estos árboles mantuvieron una parte de esta vida y crearon a los elfos.
Rituales[]
En épocas de gran necesidad, los skaal realizan una cacería ritual de bendición y de depuración que llaman el "Ristaag" para demostrar su agradecimiento y esperan el favor del Creador. También practican el Ritual de los regalos, una peregrinación para llevar a cabo ciertos rituales en cada una de las piedras del Creador y así restaurar la unidad con la tierra. Los skaal acreditan a menudo al Creador con mayor sabiduría y poder que las deidades que forman parte de las tradiciones politeístas.
Oposición[]
La oposición al Creador es el Adversario, una fuerza opositora igual de enigmática que trabaja para corromper el dominio del Creador. Los Príncipes Daédricos son tratados igual en la tradición skaal como lo son en las culturas adoradoras de los aedra, aunque presumiblemente se consideran tan sólo algunos de los muchos aspectos malos del Adversario.
En el contexto de la historia del libro Aevar Cantor de Piedras, el Creador y el Adversario tienen algunas semejanzas con Anu y Padomay, que se encuentran en un conflicto antitético similar.[1]
Apariciones[]
- The Elder Scrolls III: Bloodmoon (Sólo mencionado).
- The Elder Scrolls V: Dragonborn (Sólo mencionado).