Elder Scrolls
Advertisement

Artículo principal: Libros (Online)

Localizaciones[]

Contenido[]

De Rallaume Lemonds, cruzado culinario

¡Al fin, he llegado a los verdosos pantanos de la Ciénaga Negra! Siempre he anhelado una oportunidad de probar la auténtica cocina argoniana. ¡Ahora, por fin, el momento ha llegado! He decidido comenzar con un manjar regional: babosas.

Como toda buena comida argoniana, las babosas se sirven frecuentemente crudas y a menudo con una ramita de hoja de sal de prado. Solo pude probar tres tipos durante esta visita. El acento de mi chef era muy marcado, pero creo que la comida limitada tenía algo que ver con la estación. Aprendí que las estaciones en el pantano cambian tan rápido como el viento, por lo que podría haber toda una colección entre la que elegir en unos pocos días. ¡Confío en que serán tan sabrosas como las que he probado hoy!

Barbado azul
Esta belleza color añil es común en los fangales alrededor de las Cavernas de Tsofeer. Es casi del tamaño del pulgar de un nórdico y tiene un peludo grupo de tentáculos bajo sus largos tallos oculares. Tiene un aroma sutil, pero también unos refrescantes matices cítricos. Los tentáculos extras le dan al barbado azul una textura única que, si bien puede distraer un poco (especialmente cuando se consume vivo), su sabor es simplemente divino. Tiene un sabor terroso con suaves toques arcillosos oculto bajo un firme bocado cítrico. Me sorprendió mucho su final crujiente. ¡Todo un manjar!

Deslizante de rayas negras
La deslizante de rayas negras es más o menos un elemento básico local. Suele comerse ahumado en una cama de larvas de gorgojo y pasto naranja, pero insistí en probarla cruda. La babosa excreta un acre aceite negro cuando es perturbada, pero puede lavarse fácilmente, revelando un largo cuerpo con una serie de líneas negras por sobre un pálido manto cremoso. Incluso tras lavarse, la deslizante de rayas negras presenta un gomoso sabor tanino que uno debe degustar hasta alcanzar el limpio y matizado regusto que los argonianos parecen adorar. Un sabor suave y casi floral para una comida que de lo contrario sería intimidante.

Rey amarillo
Me maravilló escuchar que era temporada del rey amarillo. Esta es de verdad una criatura masiva; ¡casi tan larga como mi antebrazo y cubierta con un vasto bosque de carnosas cerdas ondulantes! Resulta difícil saberlo cuando se trata de argonianos, pero creo que mi chef estaba muy sorprendido de escuchar que pidiera que me sirvieran uno crudo. Puso la bestia en frente de mí, envuelta en hojas de nuez de wasso con una guarnición de lirio añil. Inmediatamente fui golpeado por el rico ramo de aromas musgosos y herbáceos. Se puede prácticamente oler toda la Ciénaga Negra en las mucosas excreciones de la criatura. Cada bocado traía consigo una nueva ola de sabores increíbles. El picoso sabor almendrado de la cola eventualmente dio paso a la aceitosa y robusta amargura del cuerpo. Al fin, llegué a la cabeza. ¡Me es imposible pensar en otra erupción de sabor igual de alarmante! Un sabor cremoso y mantecoso que oscilaba salvajemente hacia un final seco similar al sabor de la mostaza. ¡Espectacular!

Dejé la mesa con gran pesar, sabiendo que probablemente no pueda volver a saborear un rey amarillo otra vez hasta la próxima temporada, pero me regocijo en saber que el mañana me traerá una nueva y grandiosa aventura culinaria. ¡Esta vez, larvas de escarabajo! ¡Me muero de las ganas!

Apariciones[]

Advertisement