Elder Scrolls
Sin resumen de edición
Etiquetas: Edición visual apiedit
mSin resumen de edición
Etiqueta: Edición visual
Línea 14: Línea 14:
   
 
==Por juego==
 
==Por juego==
*[[Vivec (Morrowind)]]
+
*[[Vivec (Morrowind)]].
  +
*[[Vivec (Online)]].
   
 
== Ver también ==
 
== Ver también ==
* [[Vivec (ciudad)]]
+
* [[Vivec (ciudad)]].
   
 
== Apariciones ==
 
== Apariciones ==
* {{Morrowind}}.
+
* {{Morrowind}} {{1st}}.
  +
* {{online morrowind}}.
 
{{Deidades}}
 
{{Deidades}}
   

Revisión del 17:37 27 sep 2017

Vivec God

Vivec en su templo.

Para otros usos, ver "Vivec (desambiguación)"

Vivec (o Vehk) fue un guerrero-poeta deidad de los dunmer. Es la "vi" de Almsivi, el Tribunal. Era el Dios-Rey guardián de la tierra santa de Páramo de Vvarden y protector siempre vigilante de los dioses oscuros de la Montaña Roja, la puerta al infierno.

Historia

Primera Era

Vivec nació en la Primera Era en El Duelo, en lo que entonces era conocido como Resdayn, durante la ocupación nórdica de su tierra. Al poco de nacer se quedó huérfano y empezó a dirigir una banda callejera que hacía cualquier cosa, fuera ilegal o no, para conseguir dinero. En algún momento durante esta etapa fue visitado por un guardaespaldas de caravanas llamado Indoril Nerevar, y decidió unirse a él. Indoril Nerevar acabó dirigiendo una rebelión contra los nórdicos, que los expulsó de su tierra, y en ella Vivec luchó como general a su lado. Al acabar la guerra, formaron el Primer Consejo, y Vivec formó parte de él, junto con la esposa de Nerevar, Indoril Almalexia y Sotha Sil. Así, estos tres chimer se convirtieron en los más cercanos consejeros de Nerevar, ahora que él estaba a la cabeza de su pueblo, siendo llamados el Tribunal.

Aunque el tiempo ha vuelto borrosos algunos aspectos de su pasado y las preguntas rodean algunas de sus decisiones más polémicas, Vivec siempre ha representado el espíritu y la dualidad de las personas dunmer, que se refleja en su apariencia medio dunmer-medio chimer.

Durante cientos (si no miles) de años residió, principalmente, en el pináculo de su Palacio en Vivec, su capital, que era visitada por cientos de peregrinos y turistas a diario. Guió y protegió honorablemente a los dunmer durante miles de años hasta la pérdida de su divinidad y posterior desaparición casi al final de la Tercera Era, un sacrificio que no sólo aceptó, sino que ayudó a llevar a cabo.

Por juego

Ver también

Apariciones